En Estados Unidos y Canadá se los conoce como “repertory cinemas” o simplemente “reps”, cines que proyectan películas clásicas y de culto, locales que están a medio camino entre las salas de reestreno y de arte y ensayo. Nacieron en la década de los veinte y treinta del siglo pasado y se especializaron en proyectar películas europeas, sobre todo alemanas y soviéticas, y cine underground. Eran una alternativa a la programación convencional que ofrecían los grandes estudios y servían para mantener viva la idea del cine como arte y cultura y no solo como mero negocio y espectáculo. 

Este documental se centra en una de estas salas, The Underground Cinema of Toronto, y en el trabajo e ilusiones de sus responsables, Charlie Lawton, Alex Woodside y Nigel Agnew, tres entusiastas que se enfrentan a todo tipo de dificultades para que su pequeño recinto se mantenga en pie a lo largo de todo un año. “Acudir a un cine es algo único y mágico”, explica Charlie Lawton. “Se reúne gente que no se conoce de nada con un objetivo común: ver la misma película”. En la película intervienen cineastas como Atom Egoyan, Kevin Smith, John Waters y George A. Romero.