JP vive con su hermano, su madre y su novia en un pequeño apartamento en Verdun. Constantemente en la cuerda floja, JP intenta mantener el equilibrio entre las muchas necesidades de su familia, de la que se siente responsable, su trabajo como coleccionista junto a su hermano y sus obligaciones en el pequeño cartel de la droga que dirige su tío Dany, al que quiere como a un padre.