Bajo el nombre de “Estética de la Extinción” el artista Max de Esteban engloba sus investigaciones sobre las infraestructuras del mundo contemporáneo capitalista, a través de las que examina los elementos clave que definirán el siglo XXI: tecnologías, sistemas y elementos físicos específicos y las condiciones de la circulación de significado y poder. Todo un entramado de estructuras cuya función es enmarcar y habilitar lo posible. Pero, en su propia noción de marco posibilitador está inherente también la de límite, de lo que se puede o no. El estudio de sus articulaciones no solo apunta a una compresión consciente de su funcionamiento y capacidades, sino también debiera dar la capacidad de pensar fuera de sus márgenes, de dejar desbordar la imaginación.
Dentro de estas infraestructuras, como una más pero también como medio para muchas de ellas, se encuentra el lenguaje, tanto los conceptos acuñados como su transmisión, es decir, los relatos de pensamiento, con sus palabras y usos, que asientan este sistema capitalista. Palabras y usos que son al mismo tiempo los que también tenemos para definirnos como subjetividades individuales, aunque con la capacidad de una expansión poética que sirva para nuevas interpretaciones y, sobre todo, nuevas posibilidades.
Cartografía provisional, recién estrenada en la Bienal de Cuenca, es un largo diálogo del que solo escuchamos una voz, la de la madre del artista. El tiempo que ocupa en la pantalla el sonido de la locución y la imagen de un rostro de una mujer con experiencia y conocimiento, están fuera de los cánones rápidos y juveniles del capitalismo. En esta tensión confrontadora, sin embargo, se realiza el esfuerzo de poder desbloquear enunciados herméticos de la filosofía y el arte que hoy en día están discutiendo los conceptos y rasgos de una nueva era. De esta manera, a través de ocho capítulos –Sustrato de la Imagen, Materialismo, Evolución, Realidad virtual, Construcción de lo Virtual, Mirada Tecnológica, Imagen y Conocimiento e Infraestructuras– van apareciendo las claves del pensamiento contemporáneo para entender como percibimos, nos construimos y nos relacionamos dentro de los entramados socioeconómicos en los que vivimos.
Max de Esteban muestra por primera vez este trabajo en España. Acompañará la proyección para proseguir con una conversación abierta junto al filósofo Franco Bifo Berardi y la curadora del ciclo, Marta Ramos-Yzquierdo.
Max de Esteban examina en su trabajo la condición humana bajo un régimen tecnológico. Formado no sólo en el ámbito artístico, es alumno de Fulbright y tiene un doctorado en Economía y Empresa de la Universitat Ramon Lull, un MBA de la Universidad de Stanford y una maestría y una licenciatura en Ingeniería de la Universitat Politecnica de Catalunya. Sus proyectos han sido expuestos en museos e instituciones como Jeu de Paume de París, MUAC de México, NRW-Forum de Dusseldorf, Museo de Bellas Artes de Houston, Deutsche Technik Museum de Berlín, Virreina Centre de l'Imatge de Barcelona, CGAC en Santiago de Compostela y el Palacio de Tokio en París. Ha participado en la Trienal de Yokohama (2020); XIII Bienal de El Cairo (2019); XIII Bienal de la Habana (2019); XVI Bienal Fotofest (2016) y Trienal Darmstädter TdF (2014). Su obra ha sido objeto de cinco monografías: Estética de la Extinción (Turner); Veinte Luces Rojas (Virreina/La Fábrica); Proposiciones (La Fábrica); Heads will Roll (Hatje Cantz) y Elegies of Manumission (Nazraeli Press) y forma parte de colecciones de museos como Museum of Fine Arts Houston, Staatliche Museen zu Berlin, SEDF en Bratislava, Deutsche Technik Museum en Berlín, CGAC en Santiago de Compostela, Wifredo Lam en La Habana y MACBA en Barcelona.