El guion, escrito por Ghiţescu, sigue al personaje principal (Marc Titieni), un adolescente punk de 17 años cuya vida es un desastre debido al suicidio de su novia, Laura. La tragedia le impide sincronizarse con las personas que lo rodean y que piensan que la desaparición de Laura es un hecho traumático, pero no devastador. Los espectadores pueden sentir el abismo que separa a Otto de los demás desde la primera escena, cuando dos trabajadores sociales se presentan en su casa para investigar la muerte de Laura. Hay un contraste tan grande entre sus preguntas indiferentes y las respuestas vagas y reacias de Otto, que el público comprende rápidamente la pesadilla que está viviendo.